En esta época de calor que empezamos es cuando nos preocupamos más de proteger a nuestras mascotas frente a la picadura de parásitos externos y mosquitos. Además de lo desagradable de dicha picadura, lo realmente preocupante es que pueden transmitir a nuestras mascotas y a nosotros mismos enfermedades que llevan en su boca, llamadas vectoriales.

Muchas veces nos preguntamos qué método de los que existen es el mejor para protegerles de dichas picaduras, los collares, las pipetas o incluso pastillas (medicinas).

Los dos primeros, collares y pipetas, producen una barrera insecticida que se extiende por encima del pelo, en caso de los collares (durante meses), o por debajo, pegada a la piel, en caso de las pipetas (1 mes de protección generalmente). Esta barrera tiene efecto repelente sobre los parásitos y mosquitos e impide la picadura, en caso de que la atraviesen suelen morir en poco tiempo.

Las pastillas son medicinas que pasan a la sangre de las mascotas y cuando los parásitos o mosquitos les pican les producen la muerte. Pero no tienen efecto repelente.

Por tanto nosotros recomendamos en principio usar collares o pipetas, hay que resaltar que las pipetas hacen que tengamos menos contacto con el insecticida al ir por debajo del pelo, y les hacen más indicadas si hay niños pequeños en casa por ejemplo. Tienen el inconveniente de que hay que acordarse de renovarlas mensualmente. Los collares duran más.

Hay casos, dependiendo de donde viva nuestra mascota, que a pesar de poner dichos medios los animales presentan parásitos de forma continua, en esta situación sí recomendamos la utilización de las pastillas, ya que son muy efectivas y los parásitos mueren inmediatamente tras la picadura. Pero generalmente como apoyo a las medidas anteriores, ya que no evitan la picadura en sí misma y la transmisión de enfermedades como la leishmania.

Esperamos haber aclarado algunas dudas de qué método utilizar.